Frutita rica, frutita del millón. Tu poder frutal, tu brutal olor, tu color salvaje y tu tanga de hilo dental me hacen soñar. Tócame, fruta, tócame tú.
Melón o sandía, da igual, sólo hazme gozar. De mamey el licuado, de guayaba el agua, de limón el helado, de coco el corazón. De coco el corazón.