viernes, 25 de marzo de 2016

Murió por tus pecados.

Fue engendrado sin mácula. Venció a la muerte.
Con el héroe de leyenda a tope. Reflexionen, vulgo.
Cierto es que, sólo era un maldito chairo que no comprendió la envergadura del proyecto esclavista imperial de los romanos, el futuro, chingá, el futuro. Tan pendejo, pinche Yises, tan revoltoso y violento. Sí, por eso le pasó lo que le pasó, a saber en qué andaba metido el fulano y con qué gente se juntaba. Sólo un chairo depravado y perverso, seguro, sólo eso y nada más.
Ese hombre murió por ustedes, chingá, tírenle esquina, no sean ojaldras. Piénsenle. 
Acérquenle un vaso de agua, algo. Murió por tus pecados.